Con la fabricación en serie de una taza separadora para quienes construyen su propio inodoro se completa el relanzamiento de toda la línea previsto para este año. PRODUCTO DISCONTINUADO. Fue reemplazado por una nueva versión disponible en este enlace.
La taza separadora era un reclamo pendiente del público con interés en la permacultura y el saneamiento ecológico, aficionado a la autoconstrucción. Si bien la oferta de Biosánita se centra en los inodoros de cámara listos para instalar, este producto facilita la tarea a quienes desean fabricar su propia versión.
Fabricada en polietileno de alta densidad, la taza tiene un perímetro ovalado y un embudo colector para desviar la orina. Al igual que los inodoros Baccharis 2016C y 2016D, cuenta con una rejilla de plástico para prevenir la caída de material de cobertura en el conducto, que puede retirarse fácilmente para su limpieza. El pico de la parte inferior está diseñado también para su conexión a tubería de 3/4″.
La ventaja de la taza es su versatilidad. Puede usarse para construir baños secos acordes a requerimientos específicos. Por ejemplo, inodoros integrados a muebles que contengan parcial o totalmente el volumen del depósito. También permite variar la altura de instalación para dar lugar a otras posturas de uso. Si se prefiere una posición en cuclillas puede construirse un baño de cámara con la taza a nivel del piso. Por el contrario, es posible también un inodoro elevado para atender la necesidad de personas con problemas de cadera, frecuentes en la tercera edad.
Este es el primer producto que Biosánita ofrece para su venta a todo el mundo, ya que su formato y bajo peso facilitan el envío por correo postal.